lunes, 17 de octubre de 2011

Definición de beso

<< Cuando las palabras y todas las manifestaciones de amor o de poderosa atracción entre dos personas ya no tienen nada que decir, ahí llega el irresistible beso que une sus cuerpos y almas >>.

martes, 11 de octubre de 2011

Enganchados a la Telaraña digital


Me pregunto: ¿no se nos estará yendo de las manos el uso de Internet y de las nuevas tecnologías? La tecnología avanza cada día más a marchas forzadas y se integra cada vez más en nuestra vida a través de los dispositivos conectados a la red de redes.

El abaratamiento de los costes de las tarifas planas ADSL, así cómo la popularización del acceso a Internet inalámbrico a través de los cada vez más potentes dispositivos móviles es una realidad que cada día va a más.
Estos avances nos brindan cada vez más comodidad para paliar nuestras necesidades sociales, de ocio o otras clases de servicios, aunque también es verdad que esta tendencia llevada al extremo puede conducirnos a hábitos poco saludables como el sedentarismo o a percepciones alteradas de la realidad social (realidad subjetiva; Mark O'Conell, 2001). 
Pero no menos cierto es que cada vez hay más gente obsesionada o enganchada con estar conectada a Internet casi siempre para lo que sea.
En general este exceso no está percibido como un problema, pero si hablamos de una persona que pasa enganchada a la red entre 5 horas o más al día entre navegar con el ordenador y con el teléfono o la PDA dejando de lado ciertas actividades, es sin duda un caso preocupante.

Hablando en términos propios de la psicología, se puede afirmar que la adicción a Internet es una enfermedad; uno de los nombres más conocidos de esta psicopatía en concreto es ‘Internet Addiction Disorder’ (Goldberg, 1995).
Para mí, Internet es una gran aliada en cuanto al acceso inmediato a la información y servicios que necesitemos, así como un medio por el que podemos estar en contacto a través de redes sociales con nuestro círculo de amigos, pero en ningún caso la Red debería absorbernos demasiado tiempo y obsesionarnos, de tal modo que recreemos en ella nuestra propia realidad social y nuestras actividades de entretenimiento pudiéndonos convertir en solitarios, retraídos y sedentarios.

Paula es una de esas tantas personas que no podrían vivir sin estar conectadas permanentemente. Ya no recuerda que hasta hace cinco años ni tan siquiera disponía de ordenador en su casa y podía hacer una vida normal y plena. Primero, la compra de un ordenador y posteriormente la adquisición de una PDA, hicieron que se conectara cada vez más y aprovechara todos los recursos que la Red pone a su disposición.
Veamos cómo es un día normal en su vida:



07:30 ·        Se despierta, se ducha y se viste para tomar el desayuno. Mientras almuerza, conecta su PDA y accede a ‘Eltiempo.es’ para consultar la información meteorológica; parece que hoy no tendrá que llevar consigo el paraguas.

08:15 ·        Tras enfundarse en su chaqueta, sale de su casa y emprende el camino cotidiano hacia la parada del autobús. Para no aburrirse mientras llega el autobús, agarra su teléfono y a través del navegador ojea las noticias del día publicadas por su diario favorito.

08:37 ·        Por fin viene el autobús y eso le alegra ya que podrá escapar por un rato de la temperatura tan sumamente gélida que se registra allí. Mientras dura el trayecto de viaje a la oficina, aprovecha para conectarse al ‘What’sApp’ para leer sus mensajes y mandar algunos otros.

09:10 ·        Como ha llegado con tiempo al centro de trabajo, va a la zona de descanso para tomarse un zumo de naranja y ya de paso a charlar un poco con los compañeros que hay allí. Como aún después tiene un rato, se sienta en su puesto de trabajo y a través del ordenador revisa el correo laboral y el personal.

10:00 ·        Empieza la jornada laboral. Como hacen el resto de sus compañeros de oficina usa el ordenado no sólo para trabajar, sino para divertirse y pasar el rato; tras sacar su agenda y organizarse las tareas debidamente, abre el Office y tras esto abre el navegador y accede a 'Facebook' para distraer su atención de rato en rato.

14:30 ·        Ya llegado el descanso y tras comer, toma lugar en su puesto y accede a 'YouTube', para ponerse a buscar videos divertidos y reirse un poco.

15:45 ·        Mientras termina las últimas tareas de la jornada, entra en 'Ebay' busca de gangas en moda.

17:00 ·        Ya esperando el autobús que le llevará de vuelta a casa, saca su teléfono para conectarse al 'Twitter' para actualizar su estado y revisar los comentarios de sus amigos.

17:50 ·        Sin nadie que le espere en casa, nuestra protagonista llega a casa. Tras recoger un poco la casa y anotar nuevas entradas en la agenda, deja todo para sentarse en su sofá y acceder a la red con el portátil. Ella está convencida de que conectándose a 'hispachat.com' algún día hallará a su principe azul...