domingo, 20 de febrero de 2011

El origen de San Valentín

No entiendo por qué cada vez más, el 14 de Febrero se está convirtiendo en un día de regalar a la pareja
como pueda ser en Navidad los Reyes Magos o un cumpleaños. La verdad es que no lo entiendo; se está desvirtuando en  muchos casos el espíritu de la tradición con un afán comercial y completamente materialista.
Pienso que los regalos deberían ser especiales, dejando a un lado el precio de éstos.
No cuesta nada excepto molestarse, el regalar algo sugerente o único junto a una tarjeta o una carta dedicándole algo bonito a esa persona tan especial.
Por eso, insisto en la idea que para mí no es el día de El Corte Inglés ni mucho menos, porque somos los que regalamos los que decidimos si queremos regalar algo dulce y especial, o si por lo contrario preferimos hacer regalos ostentosos y carentes de sentido.

Ahora ya parece que ha caído en desuso la clásica práctica de San Valentín: no tengo constancia de que se siga haciendo demasiado, pero antes, especialmente los chicos románticos se  aprovechaban para declararse a la chica que les gustaba en cuestión. Concretamente, recuerdo de un compañero de colegio al que le gustaba una compañera; siguiendo la tradición le mandó a su casa una carta de amor y una rosa anonimamente. Después de unas semanas, estando en el recreo, estábamos jugando un grupo de clase al balón cuando el chico se acercó a ella y le reveló que él era su San Valentín y se declaró allí mismo... Yo me quedé alucinado porque nunca había visto nada así y también porque por entonces no comprendía nada del amor.

Según las crónicas históricas, la costumbre de San Valentín procede de la época imperial Romana. Valentín era un sacerdote cristiano del Siglo III, que contravino la prohibición impuesta por Claudio II por la cual los soldados profesionales en activo no podían casarse. Dicho sacerdote casó a varios jóvenes clandestinamente bajo el rito cristiano. Aunque el Emperador mostraba simpatías por la doctrina religiosa, ésta aun no estaba aceptada oficialmente, por lo que apresó y ejecutó a Valentín por haber transgredido las normas.