jueves, 25 de julio de 2013

Catástrofe ferroviaria

Fue a cuatro kilómetros del destino del tren cuando llegó el fatal desenlace. El tren se hacía añicos a casi doscientos kilómetros por hora acabando brutalmente con las esperanzas y sueños de una buena parte de sus pasajeros para siempre. Habrá juicio e indemnizaciones pero jamás se podrán reparar las vidas de aquellas familias que han quedado rotas.

jueves, 4 de julio de 2013

Persistente incertidumbre

Las mieles de las sensaciones de su interesante conversación y apetecible acercamiento de aquella noche seguían centelleando en sus pensamientos incesantemente. Ese primer contacto fue tan efímero... Sonrisas, caricias y palabras cargadas de la magia y del afecto que había nacido entre ambos. Los días han pasado y pese a ello, Alejo sigue sin saber nada de María. Poco fue lo que pudo saber de ella en aquel par de horas que conversaron y si bien no puede decirse que se enamoraran, prendió una pequeña llama en su corazón fruto de aquella especial conexión.
Pasan las horas volando como motas lleva el viento y mientras él hechizado y emocionado aguarda con la sola idea de volver a verla y saber más de ella. ¿Acaso habrá cambiado de parecer? ¿Se habrá dado cuenta de que no soy adecuado para ella? Las dudas acechan y siembran las cábalas y elucubraciones de Alejo de malos augurios, llegando a creerse privado de ella. Incertidumbre, desazón y dudas surgen como producto de nuestros miedos y preocupaciones.
Es humanamente inevitable desear y fantasear con arreglo a nuestras pretensiones, pero el deseo de un primer encuentro puede darse o no darse. La confianza y la disposición son pieza clave para comunicar lo que queremos expresar por difícil que pueda ser. Es importante que Alejo sepa controlar su ansiedad y deseo de manera que cuando se vea con María, sepa expresarle su afecto e interés de manera activa pero sosegada de manera ambos se encuentren a gusto con la conversación. El tiempo dictaminara si ella realmente llega a formar parte de la vida de Alejo o no, pero lo que es seguro que si ambos se escudan tras la peligrosa barrera de la timidez o de la inseguridad jamás podrían sincerarse. Espero que no permita que el miedo le atenace las piernas y si de veras María le dejó huella, busque ocasiones de hablar con ella porque de no hacerlo su inacción le podría salir cara.

"El que no cree en sí mismo miente siempre" (Nietzsche).